Este programa de la Universidad Andrés Bello está enfocado en la atención de niñas y niños hasta los 12 años de edad. Entrega herramientas a dentistas recién egresados y a aquellos con experiencia que quieren especializarse. Conoce más sobre el Diplomado en Ortodoncia Interceptiva.
Este programa capacita a odontólogos generales que desarrollan su labor en pacientes odontopediátricos; especialistas en odontopediatría, y odontólogos que se desempeñen en el área de atención primaria de salud, en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con anomalías dentomaxilares interceptables.
Conversamos con Teresa Jofré Morgado, cirujano dentista de profesión, magíster en Ortodoncia y Ortopedia Dentomaxilar. También es directora del Diplomado en Ortodoncia Interceptiva en la sede Viña del Mar de la UNAB.
¿Cuál es la relevancia de este programa?
Es muy importante porque es una herramienta complementaria para todo dentista general que se desarrolla trabajando con niñas y niños, tanto en el sistema público como privado. En pregrado se ve muy poco sobre ortodoncia, más que nada la teoría. En cambio, con el diplomado se analiza más la parte práctica, actualizando y reforzando las competencias de las y los profesionales. Este programa también funciona como un puntapié inicial y requisito para quienes buscan tomar especializaciones en ortodoncia u odontopediatría.
¿Cómo es el plan de estudios del diplomado?
“Tiene asignaturas que van por separado: diagnóstico, revisión bibliográfica, fundamento, terapia y laboratorio”, asegura
¿Cuál es el enfoque de cada asignatura?
Diagnóstico es lo preliminar, antes de entrar a la clínica, es decir, evaluación del paciente. Tenemos profesores invitados para esta parte del diplomado. En terapia, vemos casos clínicos y atendemos pacientes. En laboratorio, revisamos los aparatos que existen para niñas y niños, pero también pueden elaborar sus propios aparatos. También tenemos revisión bibliográfica, donde vemos lo que dice la literatura y qué es lo más actualizado que hay. Luego desarrollan un seminario y una exposición sobre el mismo. La última asignatura es de fundamento, donde se revisan materias relacionadas a lo más básico que nos lleva al uso de la terapia interceptiva.
El Diplomado en Ortodoncia Interceptiva se extiende por 10 meses, comenzando en marzo de cada año. Las clases son dos veces al mes (viernes), de 08:30 a 19:30.
Retroalimentación positiva de las y los estudiantes
Teresa Jofré asegura que “la retroalimentación de quienes han hecho este diplomado es bastante buena. La mayoría nos indica que ha sido muy útil”.
¿En qué se traduce esa buena experiencia con el Diplomado en Ortodoncia Interceptiva?
Varios de ellos nos cuentan que han postulado a las especialidades, tanto de odontropediatría como ortodoncia, donde se han dado cuenta que salen muy bien preparados y que les ayudó mucho lo que vieron en este diplomado.
Diplomado con enfoque diferenciador
¿Cuáles son las ventajas comparativas de este programa en al UNAB?
Tenemos un enfoque diferente al resto de los diplomados en ortodoncia interceptiva, el cual es interdisciplinario, ya que trabajamos en la clínica con fonoaudiólogos y kinesiólogos, para evaluar constantemente al paciente de forma integral. Las instalaciones de la Universidad Andrés Bello están en perfectas condiciones. Además, tenemos la posibilidad de entregar material vía online sin dificultad a través de la plataforma Canva. Asimismo, tenemos atención directa de pacientes que apoya el desarrollo del programa en su parte práctica.
El Diplomado en Ortodoncia Interceptiva está en formato semipresencial, tanto en la sede de Santiago como de Viña del Mar. Su modalidad de clases dos veces al mes permite a profesionales de distintas regiones poder acceder al programa, conciliando de mejor forma su vida laboral y personal. Para más información, haz click aquí.