Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aumentar las medidas de Atención Primaria en Salud (APS) en naciones con ingresos bajos y medianos podría salvar alrededor de 60 millones de vidas para el año 2030.
En este marco, la APS es fundamental para garantizar que todas las personas reciban una atención médica de calidad, pues se trata del punto de ingreso inicial al sistema sanitario.
Como tal, se enfoca en la prevención y el tratamiento de enfermedades, así como la promoción de la salud.
Además, la APS coordina la atención especializada y brinda seguimiento a pacientes con enfermedades crónicas. Esto la convierte en una pieza clave para el bienestar de las comunidades.
¿Qué es la salud integral?
La salud integral es un concepto que abarca todos los aspectos del bienestar físico, mental y social de una persona.
Se refiere al tratamiento y prevención de la enfermedad, pero también a la capacidad de un individuo para llevar una vida plena y satisfactoria en todos los aspectos.
La APS juega un rol crucial en la promoción y mantenimiento de la salud integral, pues tiene la responsabilidad de evaluar y abordar los diversos factores que influyen en ella:
- Biológicos.
- Psicológicos.
- Sociales.
- Ambientales.
Al tomar en cuenta todos estos elementos, diseñar e implementar medidas de planificación estratégica en salud, los profesionales de la APS pueden ofrecer una atención más personalizada y eficiente.
De esta manera, se logra un impacto positivo en la calidad de vida de la población.
Importancia de profesionales capacitados en APS
Uno de los problemas globales a abordar es que alrededor de 3.600 millones de personas, aún no tienen acceso completo a servicios de salud básicos.
Con respecto a ese punto, la formación de profesionales especializados es fundamental para facilitar el acceso al sistema sanitario y acompañar su atención en los aspectos antes mencionados.
Los profesionales capacitados en APS reciben una formación integral en gestión aplicada a la atención clínica. Esto hace posible implementar programas para mejorar la coordinación y el seguimiento de pacientes, igual que la gestión de los recursos y el personal de salud.
Una especialización en gestión clínica y su aplicación a la atención primaria se traduce en una mejora de la calidad en la atención médica, junto con una optimización de los recursos disponibles para poder prestar un servicio digno y equitativo a más personas.
Por otro lado, una formación de calidad en APS permite a los profesionales de la salud entender la importancia del trabajo interdisciplinario y la colaboración entre diferentes especialistas.
Esta interacción facilita un abordaje más completo de las necesidades de la población, y se traduce en una atención médica más acorde a las necesidades de los pacientes.
Diplomado en Gestión Aplicada a la Atención Primaria en Salud: un compromiso con la sociedad
Postgrado UNAB ofrece el Diplomado en Gestión Aplicada a la Atención Primaria en Salud, diseñado para formar profesionales capacitados en la gestión de centros médicos.
El programa se enfoca en aspectos como la planificación estratégica en salud y el trabajo interdisciplinario, entregando herramientas en áreas como la Epidemiología y Administración para fortalecer el sistema sanitario.
Así, los profesionales que cursen este diplomado podrán adquirir herramientas de preparación, evaluación y promoción de proyectos con respecto a dicha temática.
Esto permite el abordaje de problemas desde diferentes perspectivas, y dominar estrategias de gestión clínica en la tarea de impulsar políticas de salud exitosas.