Los estudios de posgrado ofrecen las herramientas necesarias para especializarse en algún tópico o área, amplificando y desarrollando conocimientos para aplicarse posteriormente en las carreras profesionales. Los diplomados en el área de la salud permiten que los profesionales del ramo puedan mantener sus conocimientos actualizados o adquirir nuevas habilidades, aumentando su competitividad en el mercado laboral.
A pesar del aislamiento social generado por la pandemia de COVID-19, el desarrollo profesional no debe de verse afectado, por lo que es un gran momento para aprovechar el tiempo y estudiar, enriqueciendo los conocimientos y perfeccionándose como profesional.
Tiempos de crisis: la importancia de contar con profesionales especializados
Además de la experiencia laboral, los reclutadores buscan profesionales con conocimientos actualizados o habilidades específicas. En ese sentido, los diplomados en el área de la salud pueden ser la clave a la hora de ampliar los caminos laborales.
De hecho, debido a la emergencia sanitaria, se ha hecho necesario incrementar el personal de salud para fortalecer el sistema público en un contexto de alta demanda como el actual. A través del programa «Yo sirvo a mi país en la emergencia«, el Gobierno ha convocado a todos los profesionales del área de salud para que puedan postular a un empleo y, a la vez, ayudar a miles de personas que sufren los efectos del COVID-19.
Atendiendo a ello, los diplomados en salud son la clave para que los profesionales del área puedan mejorar tanto su rendimiento como sus oportunidades laborales.
Beneficios de estudiar un diplomado
Perfeccionarse en determinadas áreas es la base del crecimiento profesional. Por ejemplo, los diplomados enfermería permiten a los profesionales especializarse en áreas como gestión de calidad, cuidados pediátricos, UCI o UTI, entre otras.
En la misma línea, los diplomados kinesiología permiten a los profesionales del área profundizar conocimientos en diversas materias, como neuro rehabilitación o terapia manual ortopédica, entre otras.
Sin embargo, más allá de los casos particulares, los diplomados en salud ofrecen diversos beneficios, entre los cuales vale la pena destacar:
- Aumentan las opciones laborales: realizar un diplomado permite a los profesionales mejorar sus opciones laborales, ya sea para acercarse al trabajo que sueñan o para incrementar sus ingresos.
- Mejor posicionamiento. Además de lo anterior, cursar un programa de especialización o perfeccionamiento permite que los profesionales de la salud puedan posicionarse mejor en sus actuales empleos, incluso, pudiendo ser en punto de partida de un ascenso.
- Corta duración: a diferencia de los programas de pregrado, una especialización no supera -generalmente- el año y medio.
- Desarrollo profesional: perfeccionar los conocimientos o adquirir nuevas habilidades es la base del desarrollo profesional.
Entendiendo que los diplomados en el área de la salud son claves para el desarrollo de los profesionales del área, es importante que optes por instituciones ampliamente reconocidas. Al respecto, en la UNAB puedes optar al Diplomado en Gestión de Calidad Sanitaria -especialmente enfocado en la carrera de Enfermería-, o al Diplomado en Neurociencia y Neuro rehabilitación, orientado a kinesiólogos, terapeutas ocupacionales y fonoaudiólogos, mayormente.
Ya sea elegir diplomados enfermería, movimiento, cuidados, investigación, ética o administración, los profesionales de la salud deben de mantener actualizados sus conocimientos, pues es la única forma de mantenerse activos en un mercado laboral tan competitivo como el actual.
La demanda de profesionales de la salud capacitados ha aumentado considerablemente en los últimos meses debido a la crisis sanitaria. Optar por la educación continua en línea amplía las posibilidades de posicionamiento laboral. Ya sean diplomados kinesiología, enfermería o rehabilitación, estudiar y ampliar los conocimientos son la clave de un futuro laboral próspero.
