Los cambios sociales son factores que constantemente están desafiando a quienes dirigen instituciones educacionales, tanto iniciales, escolares como de educación superior. En ese sentido, la UNAB tiene un programa, presente se Arica a Magallanes, que entrega herramientas para el liderazgo, gestión y mejoras en la educación.
El Magíster en Dirección y Liderazgo para la Gestión Educacional es probablemente el programa que más líderes está formando actualmente en Chile. Esto porque la Universidad Andrés Bello tiene a disposición este postgrado a lo largo del país a través de su versión online, una ventaja comparativa frente a otras instituciones.
Ya están quedando en evidencia algunas consecuencias que dejó la pandemia, por ejemplo, con los últimos resultados del Simce. En ahí donde la dirección de una organización educativa es fundamental para plantear y ejecutar soluciones, que es uno de los aspectos principales que desarrolla este postgrado de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Unab.
Conversamos con Luis Navarro Navarro, integrante del equipo docente de este magíster.
A su parecer, ¿existe una demanda permanente por un buen liderazgo?
Efectivamente, en la literatura o en la investigación se dice que el segundo factor que mejor explica los resultados académicos tiene que ver con el liderazgo. El primero tiene que ver con el aula, con la gestión del docente, y el segundo es el trabajo de quien dirige la institución educativa. Los y las líderes deben guiar el proceso de cambio, y esto es una cuestión que bien exploramos en este magíster; enseñamos a mirar la organización, pero también a generar los cambios.
Espacio para el intercambio de experiencias
Éste es un programa dirigido a profesionales que pertenecen a instituciones educativas, ya sea en puestos de liderazgo o en miras de postular a un cargo de dirección.
¿Cuál es el perfil de las personas que postulan?
En general, la mayor cantidad de estudiantes que eligen este magíster son profesionales de escuelas o liceos, pero también tenemos un público de educación inicial, por ejemplo, directoras de jardines infantiles y educadoras especiales, aunque igual tenemos un grupo menor que trabajan en cargos intermedios de la educación superior, es decir, de jefaturas de áreas o departamentos. Es un espacio para intercambiar experiencias de los tres niveles educativos donde se puede dar una conversación interesante.
¿Qué características tiene el programa que reciben las y los estudiantes?
Yo creo que este programa tiene una visión bien comprensiva en el sentido que globaliza muy bien todos los grandes temas: liderazgo educativo, gestión escolar, y cambios y mejoras de la gestión, que son las tres grandes áreas que trabaja el magíster. Te entrega herramientas que están muy conectadas con la política educativa, en términos del modo de entender la escuela, el jardín infantil, los modelos de calidad, entre otras temáticas.
Liderar cambios para mejorar la educación
¿Cree usted que aún existen muchas barreras que limitan los cambios en la educación?
El peso de la política pública hace que la autonomía de la escuela se vea bien reducida a veces, ya que tenemos un sistema muy centralizado y marcado por la evaluación. Al mismo tiempo, dentro de ese marco que parece un rayado de cancha estricto, hay mucho espacio para hacer cosas, entonces la imaginación directiva o del líder, es una cuestión que evidentemente hay que desarrollar y que tiene que ver con dos claves: comprender cuál es la buena escuela que quiere la comunidad educativa, y en el fondo mirar mucho la experiencia comparada o aquellas cosas que funcionan en otros lugares similares a nivel nacional.
Investigar, aprender de la experiencia comparada, pero al mismo tiempo leer muy bien el territorio, la escuela, la realidad cultural, las familias, el tipo de estudiante, son algunos de los factores que se analizan en este postgrado para el liderazgo, gestión y mejoras en la educación.
Un magíster que se destaca por integrar todo lo aprendido en un proyecto final donde se proponen cambios reales a una organización educativa. Además, está en dos formatos: presencial y online, ambos con el mismo plan de estudios. Y, finalmente, entrega la posibilidad de obtener dos diplomados dentro de los tres semestres que dura. El valor agregado que solo entrega la UNAB.
