Cada vez son más las y los profesionales de la salud que están mejorando sus competencias con el Magíster en Salud Pública, programa que aporta a mejorar las atenciones de los pacientes a través de la gestión.
“La graduación fue bastante bonita, porque fue el cierre de una etapa que fue un poquito más difícil en los estudios, esto debido a la pandemia”, recuerda el doctor Guillermo Piña, ex estudiante del Magíster en Salud Pública del Instituto de Salud Pública (ISP) de la Universidad Andrés Bello.
Médico de profesión proveniente de Venezuela. Llegó hace 8 años a Chile y ha trabajado durante una década en urgencias, específicamente en la atención de salud mental.
¿Qué fue lo más complicado de estudiar en pandemia?
Básicamente el estrés. Yo estaba en la primera línea en ese entonces cuando el covid recién llegó, y justamente me tocó estudiar. Me llamó la atención que la gente vio lo importante que es la salud pública, la gestión de los recursos, de personal, de las políticas públicas de vacunación, entre otras cosas.
Magíster en Salud Pública flexible y adaptado a los tiempos
El día de la graduación del Magíster en Salud Pública, Guillermo estuvo acompañado de su madre y de amigos de Venezuela y Ecuador, quienes tuvieron la oportunidad de seguir la ceremonia por la transmisión en vivo.
¿Cuáles son los aspectos que más destacaría de este programa?
Lo que más me gustó fue la flexibilidad, porque yo trabajaba de tarde-noche. En ese tiempo trabajaba en Vallenar y era complicado conseguir un buen magíster que me permitiera estudiar según los horarios que yo tenía disponible. Yo tuve que hacer turnos extra durante la pandemia, entonces me tocaba estudiar en la madrugada o en la mañana. Y esta modalidad me permitió conectarme en mis horarios libres y compartir con varias personas de distintas regiones de Chile.
Un programa que expande y mejora tu empleabilidad
Después de la pandemia, el doctor Guillermo Piña, graduado del Magíster en Salud Pública, dejó las atenciones de urgencias y se dedica a las consultas médicas y gestión. Su último trabajo fue en la subdirección de Red Salud de Iquique.
¿Cómo podría reflejar el aporte que le entregó este magíster?
Yo me gradué y al mes conseguí el empleo de Iquique. Trabajé durante un año por acá y ahora voy a regresarme a La Serena para estar más cerca de la familia.
Magíster multidisciplinario para abordar la gestión en salud
“La salud pública en Chile es muy distinta a la de Venezuela, ya que acá hay mucha actuación del privado, a diferencia del sistema venezolano donde hay un seguro único universal y hay otros complementarios”, reconoce Guillermo Piña al comparar ambos sistemas. Según si experiencia, Chile estaría migrando hacia un sistema similar al de su paús de origen.
¿Cómo fue para usted compartir con otros profesionales de la salud?
Fue una experiencia bastante buena. Yo estudié con dentistas, kinesiólogos, nutricionistas, médicos, fue un grupo multidisciplinario. Nos pudimos apoyar según la expertice de cada quien, ya que el Magíster en Salud Pública toca diversas temáticas. Muchas de las asignaturas nos pedían hacer evaluaciones económicas o estudios, entonces ahí nos favorecía tener compañeros de distintas profesiones.
Un programa esencial para entender la realidad de la salud pública
Guillermo Piña sacó el máximo provecho del Magíster en Salud Pública de la UNAB; pese a que habían restricciones de movilidad, tomó la opción de hacer una pasantía distancia, en formato virtual. “Hice la de la Universidad de Harvard y fue bastante provechosa porque hablaron de la seguridad y la calidad de las atenciones médicas, y también conocer otros modelos de salud, por ejemplo, el de Estados Unidos”.
¿Por qué recomendaría a profesionales de la salud este programa?
Yo creo que todo profesional de la salud tiene que tener cierta noción de la salud pública. Con esto logra ver que, aunque uno no esté en un cargo directivo o de jefatura, uno hace salud pública todos los días; con las normativas, con los reglamentos, entendiendo lo que necesita el paciente o las mayores brechas. Uno como profesional de la salud siempre termina siendo jefe de algo. Entonces, este magíster lo veo esencial para cualquier profesional de la salud, para que entendamos que todos estamos conectados en el mismo carril, que es mejorar la salud de las personas.
